Ernest Hemingway dijo una vez: «En nuestros momentos más oscuros, no necesitamos soluciones ni consejos. Lo que anhelamos es simplemente conexión humana: una presencia silenciosa, un toque suave.» Son esos pequeños gestos los que se convierten en anclas firmes cuando la vida parece demasiado pesada. Por favor, no intentes arreglarme. No trates de disipar mis sombras ni de cargar mi dolor. Solo siéntate a mi lado mientras enfrento mis tormentas internas. Sé la mano que puedo alcanzar mientras busco mi propio equilibrio. Mi dolor es mío, mis batallas son solo…
Leer más